sábado, 22 de diciembre de 2012

Buenos días pequeña.



No hay nada mejor que despertar a tu lado cada mañana, pequeña. Adoro abrir los ojos, y verte durmiendo. Poder ver cada detalle de tu hermosa cara. Preguntarme como eres tan jodidamente perfecta, y qué que he hecho para tenerte a mi lado. Porque no tienes precio. Jamás te dejaría ir, jamás te fallaría. Me preguntan como he dejado de ser un golfo, y como puedo estar tan enamorado. Me has cambiado, princesa. Has llegado a mi vida, y has hecho que todo mi mundo ya no tenga sentido sin ti. Todo se paraliza cuando te miro a los ojos, y es que cuando nuestras miradas se cruzan, no hacen falta palabras. Sé exactamente cuando estás a punto de llorar, cuando necesitas un abrazo, o cuando necesitas que te haga reír. Y yo haré lo que sea para hacerte feliz princesa. Eres lo mejor, y cada día te agradeceré que estés a mi lado. Doy gracias por poder rozar tu piel, acariciar tu espalda, besar tus labios y poder ver tu hermosa sonrisa a mi lado. No veo al fin a esto, ni lo quiero tener. Me complementas. Eres exactamente mi marca de heroína.

No hay comentarios:

Publicar un comentario