Un truco de magia.

 

+ Al menos déjame hacerte un truco de magia, es buenísimo.
- ¿Un truco?
+ Sí mira, consiste en que yo te doy a tí un beso en la boca pero sin tocarte los labios.
- ¡Que no te voy a dar ningún beso!
+ Pero que es sin tocarte los labios..
- Que no, que eso es imposible.
+ ¡Por eso es un truco! Tú solo tienes que cerrar los ojos.
- ... ¿Sin tocarme los labios?
+ Exacto, es como una especie de beso mágico..
- No sé si fiarme.. Sonríe.
+ Que no vá a pasar nada..
- Está bien. Sonríe y cierra los ojos.
Se acercan, él la besa durante unos veinte segundos y ella se aparta medio mosqueada medio contenta.
-Pero.. me has tocado los labios.
+ Ya, porque algo ha salido mal...
- ¡Qué morro tienes! Sonríe aún más.
+.. ¿Me dejas probar otra vez?